2 Reyes 1:13-14 Volvió a enviar al tercer capitán de cincuenta con sus cincuenta; y subiendo aquel tercer capitán de cincuenta, se puso de rodillas delante de Elías y le rogó, diciendo: Varón de Dios, te ruego que sea de valor delante de tus ojos mi vida, y la vida de estos tus cincuenta siervos. He aquí ha descendido fuego del cielo, y ha consumido a los dos primeros capitanes de cincuenta con sus cincuenta; sea estimada ahora mi vida delante de tus ojos.
El capitán del último escuadrón que es enviado a Elías demuestra respeto y temor; causa que lo lleva a realizar reverencia delante de Elías, reconociéndole como un verdadero profeta de DIOS. Ruega por su vida y por la de los que sirven junto a él, entiende que si no se humilla su destino no será distinto al de los dos primeros escuadrones que fueron enviados. Con la aptitud doblegaba este capitán nos muestra que reconoce quien es el TODOPODEROSO. Y, solamente doblegándose logra liberarse de la gran ira divina que caía del cielo. Sea nuestra actitud siempre la de humillarnos ante DIOS para salvación, que seamos liberados de su justo juicio, y de las terribles consecuencias de la condenación venidera después de esta vida. Vivamos sometidos a Él porque producto de sus manos somos. Humillémonos para arrepentimiento que produce salvación de la cual no hay contrición.